Desde los años 80, los currículos escolares en Chile e Hispanoamérica tendieron a eliminar la enseñanza de la gramática para enfocarse en el uso del lenguaje oral y escrito en contextos reales. Esto significó un fuerte énfasis en la enseñanza de habilidades comunicativas de lectura, escritura y oralidad. En ese contexto, un estudio del CIAE y del Instituto de Estudios Avanzados en Educación analizó las creencias de docentes acerca de la enseñanza de la gramática.